Bolsonaro logró la pobreza extrema más baja desde 1980 en solo 4 años de gestión

El Banco Mundial estima que más de 7 millones de brasileños salieron de la pobreza más extrema desde 2019. La caída de la pobreza fue la más pronunciada en América Latina durante el año 2020. 

La base de datos oficial del Banco Mundial confirmó que la política social de Brasil durante la administración de Jair Bolsonaro fue la más exitosa en Sudamérica en el año 2020. Las ayudas sociales y transferencias percibidas por la población más vulnerable durante la pandemia, así como la negativa de una cuarentena a nivel federal, impactaron positivamente en reducir la marginalidad. 

La tasa de pobreza extrema en Brasil cayó del 5,39% en 2019 al 1,95% para el año 2020, de acuerdo a una línea de medición de 2,15 dólares al día, a precios de 2017 y ajustados por paridad de poder adquisitivo (PPP). Según proyecciones de la misma fuente, si bien en 2021 hubo una pequeña subida de este indicar, este año se volvió a corregir a la baja y Bolsonaro completará su mandato con un número entorno al 2%.

De esta manera, la pobreza extrema llegó al nivel más bajo de la historia de Brasil desde 1980, y lo hizo solo en 4 años. Se registró incluso un pico inferior al 3,33% registrado durante el año 2014, el último periodo de bonanza del PT antes del estallido de la severa crisis económica y financiera bajo la administración de Dilma Rousseff. 

El estallido de la crisis en el seno del último gobierno del PT abortó el proceso de desarrollo social que se vivía en Brasil desde mediados de la década de 1990, a raíz de la aplicación de una serie de medidas estructurales como parte del Consenso de Washington. 

La cantidad de personas que cayeron bajo el umbral de la pobreza extrema fue de 4,14 millones en el año 2021, frente a las 11,37 millones que había en 2019. La gestión de Bolsonaro logró que más de 7 millones de brasileños pudieran superar la línea de la indigencia. 

Los registros del Banco Mundial para el año 2020 evidencian que Brasil obtuvo una de las tasas de pobreza extrema más bajas en la región (usando la misma vara de medición), sólo por detrás de Argentina (1,07%), Uruguay (0,2%), Paraguay (0,81%), Chile (0,75%) y El Salvador (1,4%). 

En dinámica, la situación de Brasil fue la más favorable de Sudamérica, porque ningún otro país de la región logró obtener una caída tan significativa en la pobreza extrema de 2020. De hecho, la mayor parte de los países de la región observaron un deterioro de la pobreza en 2020, y el caso de Brasil constituye más bien una excepción a la regla. 

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